Espeleoturismo, Sostenibilidad, Participación y Consciencia

La Península de Yucatán no es particularmente famosa por sus cuevas, pero debería serlo. Dos lugares sobresalen como los más extremos para visitar, no por su difícil acceso, sino por el espectáculo que la Madre Naturaleza tiene para ofrecernos. En uno, millones de murciélagos entran y salen de una cueva al atardecer; en otro, decenas de serpientes se balancean del techo en otra cueva en total oscuridad para darse un festín de murciélagos.